La actualidad de nuestros entornos de formación ha cambiado drásticamente, las nuevas herramientas de conectividad y la dinámica social han cambiado no sólo el enfoque social sino también el entorno educativo.
Las herramientas tecnológicas, y los ambientes de estudio tienden mas a la conectividad, es normal que en este proceso se trate de buscar un equilibrio entre la presencialidad, vital para la formación en valores, la interacción social y el desarrollo de la personalidad; pero también es importante crear espacios de interacción y desarrollo tecnológico, ya que desde allí se irán desarrollando las nuevas dinámicas educativas.
El Modelo B-Learining (Blending Learning) pretende crear un balance entre la formación presencial y los Entornos Virtuales de Aprendizaje, ayudando así a resolver ambas necesidades, la del contacto y desarrollo social en la presencialidad y la de potenciar el proceso digital en las instituciones.
El proceso puede resultar muy acertado si se definen claramente los enfoques y cómo se complementan los momentos y herramientas de formación. La formación en su porción virtual deberá enfocarse en los procesos básicos y técnicos, como información que se reparte de manera concreta y repetitiva dentro del programa.
Un ejemplo puede ser la Historia, el recorrido por los hechos fundamentales de la historia, las fechas, los logros, aciertos y experiencias, así como las referencias bibliográficas en linea, pueden ser muy útiles, ya que el alumno puede desarrollar este contenido de manera individual, permitiéndole procesar toda la información en su propio tiempo y bajo sus propias condiciones de comodidad y disposición; mientras que el tiempo presencial de la misma temática lo puede dedicar el profesor o formador, a entender, como dichos eventos pueden tener una marca cultural o generar interacciones de apreciación grupal y desde eso mismo la aplicación para reforzar valores.
Desde el modelo B-Learning se pretende lograr un acercamiento a la tecnología como soporte para el procesamiento de información, y la presencialidad como refuerzo en valores humanos.